Elena Ramos

Auditoría y Control de Proyectos

Elena Ramos Gutiérrez es un ejemplo de cómo la dedicación y la iniciativa pueden llevarte de entrar como recepcionista en 2007 a la Gestión de la Comunicación primero, al Departamento Comercial después, y de ahí a acompañar a Ana Bernardo en la Auditoría y Control de Proyectos.

 

¿Es el suyo un caso aislado de ascenso dentro del organigrama de TSK?

En absoluto. Una de las grandes ventajas de trabajar en TSK es el hecho de que el reconocimiento y las oportunidades llegan si una trabaja duro y demuestra su valía y su compromiso con la empresa. Siempre es de agradecer el encontrarse en un entorno laboral donde no te encasillan y tienes la oportunidad de progresar. Y más aún, conciliando.

 

¿Cómo ha sido su experiencia de conciliación?

Sinceramente, muy buena. He de decir que, siendo madre o no, existe la posibilidad de entrar o salir en un margen de horas que te permiten venir en autobús sin temer un atasco o madrugar para salir temprano y aprovechar la tarde.

 

¿Y en su caso, como madre?

En mi caso tengo una jornada de 30 horas que me permite dejar a mis hijas en el colegio y poder desarrollar mi labor en la empresa con total normalidad. Somos muchas madres las que disfrutamos de este horario y jamás hemos escuchado quejas.

 

¿Cómo definiría su relación con el equipo directivo?

Puede sonar a tópico, pero son como uno más. La empresa ha crecido muchísimo desde mi incorporación, pero todos saben cómo se llaman sus compañeros y todos somos accesibles, desde el recién llegado hasta cualquier miembro del Comité de Dirección. Si alguien nos viese un día normal en la oficina, nadie diría que aquí trabaja un millar de personas y se factura por encima de 1000 millones de Euros; parece una pequeña empresa familiar. No deja de haber mucho trabajo, pero el ambiente es bueno y la gente trabaja contenta. De alguna manera, se genera un ambiente de pertenencia, de ser algo más que simples empleados.

 

¿Ayuda a ello la ubicación?

Por supuesto; la ubicación en un entorno completamente verde, a las afueras de la ciudad, en pleno Parque Tecnológico y con la Universidad Laboral al lado… Es un emplazamiento excelente. Además, durante la pausa para el almuerzo podemos ir a entrenar al gimnasio que hay en la planta baja o salir a pasear o correr por los alrededores y respirar aire limpio. Es un aspecto más que hace que no se me ocurra un lugar mejor donde trabajar.